-Mi amigo no ha regresado del campo de batalla Señor. Solicito permiso para ir a buscarlo.
-Permiso denegado
-replicó el oficial-
No quiero que arriesgue usted su vida por un hombre que probablemente ha muerto.
El soldado haciendo caso omiso de la prohibición, salió,
y una hora más tarde regreso mortalmente herido, transportando el cadáver de su amigo.
El oficial estaba furioso:
¡Ya le dije yo que había muerto!!!
¿ Dígame, merecía la pena ir allá para traer un cadáver?
Y el soldado moribundo, respondió:
-Claro que sí Señor.
Cuando lo encontré, todavía estaba vivo y pudo decirme:
- ¡"Estaba seguro que vendrías".
"Un Amigo es aquel que llega, cuando todo el mundo se ha ido"
Nunca llegamos a valorar la amistad de alguien hasta que nuestr@ amig@ se va.
Pero a veces hace falta que se vaya para que nos demos cuenta del valor real de su amistad.
Los amigos son como los buenos Libros, no es necesario tener muchos, sino los mejores.
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